Cárcel La Tramacúa de Valledupar
Prisioneros denuncian graves violaciones a los derechos
humanos por parte del Inpec
Por Camilo Raigozo. Notimundo
Los prisioneros de la Torre 5 de la cárcel La Tramacúa
denunciaron que este 15 de enero de 2015 a las 3:30 horas, dos guardianes
requirieron al interno Leonardo Yepes a una requisa por encontrarse en área no
permitida.
El interno atendió el requerimiento pero de inmediato los
guardianes lo emprendieron a golpes, mientras que los demás internos acudieron
en su ayuda.
Antes de los hechos se presentó un operativo donde los
guardianes le arrojaron a los internos cinco granadas lacrimógenas y agredieron
a garrote a quién reclamaba sus derechos.
En medio del ataque del Inpec algunos internos escalaron
la estructura hasta una altura de cuatro pisos. Los guardianes, entre ellos el
dragoniante Reyes, les echaron a los internos gas pimienta en los ojos y
golpearon las manos de estos con la intención de tumbarlos lo que casi ocasiona
una tragedia.
Los otros internos tuvieron que recibir los garrotazos de
la guardia para socorrer a los internos que tenían en el pasillo siendo bajados
con lazos improvisados de sabanas.
Varios internos presentan contusiones y laceraciones en
la cabeza, incluso heridas abiertas, como el caso del interno Leonardo Yepes.
Los siguientes
prisioneros presentaron heridas graves: Leonardo Yepes; alias Yimy Yimy; Jorge
Luis Barrera Martínez; Cristian Herrera Calero: Javier Enrique Ariza Nuñez y
James Bravo Luis Miguel.
Las víctimas fueron sacados del patio y asignados en la
noche en los calabozos en estado de
total indefensión.
Estos hechos criminales se suman otras agresiones en días
recientes donde el interno Elkin Figueroa Rivera fue golpeado y esposado por
protestar al no recibir atención médica, cuando su hermano Oscar Figueroa
Rivera acudió a su defensa, se generó un operativo donde los dos internos se
subieron a la estructura y el segundo tuvo que ser auxiliado por los otros
internos para que no se ahorcara.
El teniente Sáchica, el cabo Guerrero y el cabo Mendoza prometieron
no golpearlos, pero luego de ser puestos en estado de indefensión y en celdas
de aislamiento durante la noche fueron torturados con gases en los genitales,
golpeados.
“Estos hechos reafirman una vez más como La Tramacúa
no es más que un centro de tortura donde
se violentan todos los derechos fundamentales y la resocialización penal se reduce al garrote, al
tábano, al gas y las golpizas”, afirman los internos en su denuncia.