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San Martín, Cesar
Paramilitares incursionaron en la comunidad de Terraplén y destruyeron todo
Por Camilo Raigozo. Notimundo
La Comisión de Interlocución del Sur de Bolívar, Centro y
Sur del Cesar y otras organizaciones, denunciaron con urgencia que el pasado 2 de
junio a las 11de la noche paramilitares que inicialmente se identificaron como
guerrilleros de las FARC EP, pero que luego aceptaron ser paramilitares ingresaron
a los playones de la Ciénaga La Torcoroma donde se encuentran los campesinos y
pescadores.
Como en los mejores tiempos del régimen de terror de
Uribe, los criminales llegaron gritando: “donde están Evaristo, Jimi y Emilio
para matarlos”. Evaristo Simanca Sosa es vocero de la Comisión de Interlocución
del Sur de Bolívar, Centro y Sur del Cesar, mientras que Emilio Guevara y Jimi
Rojas, son líderes y voceros de la comunidad, los cuales ya han sido amenazados
por los ‘paras’.
Los campesinos y pescadores fueron amarrados, golpeados
y torturados con machetes y armas de
fuego. Igualmente fueron insultados y agredidos verbalmente. Los criminales los
mantuvieron secuestrados por varias horas. Entre las víctimas había mujeres, ancianos
y hombres. La denuncia no menciona si allí se encontraban niños.
El grupo de delincuentes mal llamados “autodefensas campesinas”
destruyó los ranchos, las cámaras de video, fotográficas, utensilios de cocina,
botaron los alimentos al caño, lo mismo que las semillas de maíz, frijol, yuca,
plátano, patilla y ahuyama, fumigadoras, herbicidas y abonos.
Así mismo se llevaron las banderas pertenecientes a las
organizaciones sociales, entre ellas la del Congreso de los Pueblos, como
prueba de haber hecho la acción y en cumplimiento a las órdenes de su patrón,
el presunto jefe paramilitar Alirio Díaz.
El Ejército y la Policía hicieron presencia en el lugar
de los hechos horas después cuando los paras ya habían huido. Sin embargo uno
de los criminales fue hallado en posesión de un arma de fuego y una caja de
municiones.
El sujeto fue identificado por las víctimas como uno de
los agresores de la noche anterior y quien ha amenazado y agredido en varias
ocasiones a los labriegos y pescadores. El bandido ha amenazado a la comunidad
con que “estoy esperando la orden del patrón para matar a unos cuantos".
Según la denuncia este sujeto hace parte del grupo paramilitar
que se encuentra al servicio de Alirio Díaz.
El Ejército y la Policía del lado de los delincuentes
Igualmente las comunidades afectadas y sus organizaciones
sociales denunciaron que “la fuerza pública en cabeza del sargento Ibarra,
quien llegó el día de hoy y en forma agresiva se dirigió a los líderes
manifestando su molestia por las denuncias hechas en días pasados”.
Según el sargento Ibarra, dichas denuncias fueron
publicadas en “medios dudosos”, refiriéndose y estigmatizando a la prensa
alternativa y las organizaciones sociales y de derechos humanos que difundieron
dichas denuncias sobre los atropellos de los ‘paras’ y la Fuerza Pública.
Después de la agresión la comunidad se concentró en los
alrededores de la finca Las Flores, propiedad de Alirio Díaz, donde se encontraban
escondidos los paramilitares.
Por presión de la comunidad la propiedad de Díaz fue
allanada y se logró la captura de 14 paramilitares y un buen lote de armamento.
El pasado 28 de mayo los “trabajadores” de Alirio Díaz, condujeron
al ganado hacia los terrenos de cultivo de los campesinos y agredieron
físicamente a un pescador. “El hecho constituye una clara agresión a la comunidad,
ya que la incursión del ganado a los playones destruye los cultivos de patilla,
melón, maíz, ahuyama, plátano y yuca sembrados por la comunidad”, dicen las víctimas.
Al día siguiente, 29 de mayo en horas de la mañana, Sigifredo
Camargo, otro de los “trabajadores” de Alirio Díaz, amenazó con desbaratar el
rancho de la comunidad. Luego como a las 10:30 de la mañana el sujeto intentó nuevamente de
manera infructuosa meter el ganado en los cultivos.
Ante la resistencia de los campesinos para que sus
cultivos no fueran destruidos los “trabajadores” de Díaz destruyeron el rancho,
botaron la madera al río y picaron el plástico de los techos a punta de
machete. Ese mismo día la Policía de San Martín ingreso a la Finca Las Flores,
según versiones de la comunidad llamados por Alirio Díaz para que le brindara
protección.
Ante los atropellos la comunidad acudió a la inspección
de policía para instaurar la denuncia. Sin embargo el inspector del corregimiento
Marvin Mejía se negó a recibir la denuncia aduciendo que no tenía tiempo.
Les dijo a los campesinos que tenían que esperar a que él
citara a los “trabajadores” de Alirio Díaz para hacer un careo, porque el
terrateniente también tendría derecho sobre los playones.
Los pobladores hicieron valer sus derechos y le recordaron
al inepto funcionario sus obligaciones constitucionales y legales. Igualmente le
enseñaron que las leyes indican claramente que el uso prioritario de los
playones es para pequeños campesinos y pescadores y que tampoco se pueden
privatizar como lo pretende hacer el presunto bandido Alirio Díaz.
Quien es Alirio Díaz
Según la denuncia, este sujeto es un político, terrateniente
del Cesar que fue elegido como concejal del municipio de San Martin con apoyo
económico y militar de los paramilitares. Así lo han denunciado ante las
autoridades judiciales cabecillas ‘paras’, entre estos Juan Francisco Prada,
alias “juancho prada”.
De acuerdo con las versiones libres de varios
paramilitares, “miembros del ‘frente héctor julio peinado becerra participaron
en las elecciones de los cargos públicos del orden local, departamental y
nacional, en los municipios de San Martín, San Alberto, Aguachica, Gamarra, Río
de Oro, Ocaña y Abrego”.
Por ejemplo, en la versión libre de Javier Antonio
Coronel, alias “pica pica”, el 14 de diciembre del 2011, manifestó:
“(…) estos son los políticos que por el momento me
acuerdo que recibieron el apoyo de la Organización: (…); Alirio Díaz al consejo
de Terraplén.
“(…) ellos los
candidatos recibían apoyo militar de nosotros. ‘Se lanzó de alcalde fulano de
tal’, a nosotros nos mandaban de a tres o cuatro muchachos paramilitares por
caserío y nosotros le decíamos a la gente es que tiene que votar por este
político; o en el tiempo de la campaña, este alcalde o concejal, nosotros le
prestábamos seguridad”.
Por qué hay conflicto par la tierra
La comunidad de Terraplén hace más de un mes decidió
regresar a los playones comunales y la ciénaga La Torcorama, ante la inoperancia
del Incoder para culminar el proceso de deslinde y delimitación iniciado en el
año 2011.
En junio de 2014, la comunidad fue desplazada
forzadamente por el terrateniente Alirio Díaz, quien con el fin de sembrar
palma aceitera, se ha apoderado de la ciénaga de La Torcoroma, secándola
mediante el uso de murallas y diques, dragado y ganado que afectan el
ecosistema del rio Lebrija.
Esto ha afectado gravemente a más de 700 familias cuya
existencia depende de la pesca y de los cultivos de pancoger que se han dejado
de sembrar.
La Corporación Autónoma Regional del Cesar, Corpocesar, inició
procedimiento sancionatorio ambiental contra Darío Daza, Raúl Flórez, Elber
Flórez, Alonso Flórez, Luis García y Alirio Díaz.
Así mismo ordenó la suspensión de las actividades de pastoreo de ganado, la destrucción de murallas, jarillones, excavaciones o trabajo en el
complejo cenagoso, con los cuales se estaba extrayendo material de arrastre.
Sin embargo a la fecha se puede observar las murallas,
los jarillones y el ganado pastando, sin que se haya cumplido la orden
impartida por la corporación ambiental.
La comunidad manifiesta preocupación por la situación y la demora de las
instituciones encargadas en dar solución a la problemática, y mientras
tanto cada vez se pierden más espejos de
agua, se incrementa la siembra de palma, se rellenan los playones y se
incrementa la presencia de paramilitares.
Las comunidades han sido víctimas en forma reiterada de
desplazamiento y se encuentran expuestas a constantes amenazas, señalamientos,
presiones y hostigamientos, por parte de Alirio Díaz y los hombres armados que
tiene a su servicio ante la mirada cómplice de las autoridades.