Orden de captura contra 13 presuntos bandidos del Ejército y dos de la Policía
Por Camilo Raigozo. Notimundo
El presunto criminal, coronel Robinson González del Río, además de sus presuntas andanzas de corrupción en el carrusel de la contratación de las fuerzas militares, tendrá que responder por el delito de tráfico de armas para las hordas paramilitares y otros grupos delincuenciales.
González del Río es un aventajado sobrino del criminal confeso, general Rito Alejo del Río, condenado a 25 años de vacaciones en las instalaciones del Ejército, por el asesinato del campesino Marino López a quién los paramilitares, cómplices del general, le cortaron la cabeza.
González del Río además de los escándalos de corrupción destapados por la revista Semana, está siendo investigado y procesado por el asesinato a sangre fría de varias personas cuando comandaba el batallón 57 Mártires de Puerrés en 2007 en Caldas.
Según informes de la Fiscalía el 30 de septiembre de 2007 militares bajo el mando de González del Rió asesinaron a dos labriegos en Neira, Caldas y luego los presentaron como guerrilleros.
El sobresaliente sobrino del bandido general Del Río también está implicado –según el ente acusador- en los asesinatos de otras dos personas en Neira, cuatro en Chinchiná y uno en Salamina, Caldas.
Ayer la Fiscalía dictó 15 órdenes de captura, entre los que está Del Río, contra cuatro militares activos, seis en retiro y dos de la Policía, por el escándalo de corrupción en las Fuerzas Militares.
La investigación contra el aventajado sobrino se inició en el 2012 luego de conocerse detalles sobre una red de tráfico de armas en varios batallones de la que González del Río era el cabecilla informó la Fiscalía.
El presunto bandido es acusado de varios delitos como concierto para delinquir, tráfico de armas, corrupción y asesinatos a sangre fría, entre otros. Un prontuario digno de que el expresidente Uribe le rinda un homenaje de desagravio tal como lo hizo con su tío el terrorista Rito Alejo del Río.