Las comunidades del norte y el nordeste de Antioquia, nos
indignamos y caminamos por la paz
Por: Organizaciones sociales
Por: Organizaciones sociales
Las comunidades campesinas del norte y el nordeste
antioqueño exigimos hacer parte de todo proceso de diálogo de paz que se lleve
a cabo en Colombia.
Las comunidades tenemos la llave de la paz y somos las
principales víctimas del conflicto social y armado que se viene presentado por
más de 50 años en nuestros territorios,-
por lo tanto queremos hacernos
partícipes en un dialogo que se debe dar desde las comunidades en el marco del
respeto y las garantías de los derechos humanos,-
entendiéndolos de forma
integral, incluyendo el derecho a la salud, la educación, la vida, la
movilización, la tierra y el territorio.
Entendemos que la paz no es solo un producto de la
conciliación de la Guerra, las comunidades campesinas consideramos que para
exista la paz deben incluir se condiciones de justicia social,-
por lo tanto la
solución pasa por tener en cuenta las reivindicaciones de las comunidades
frente a la defensa de la tierra y el territorio y la garantía de los derechos
humanos.
Este 12 de octubre nos indignamos verdaderos luchadores
del día al día que construimos a diario un país donde quepamos todos,-
por lo
tanto presentamos a la comunidad de Barbosa y la comunidad nacional, los
siguientes puntos que resumen nuestra visión de un país incluyente en paz con
justicia social:
1. os
campesinos y campesinas de Antioquia, exigimos una reforma agraria integral,
encaminada en la construcción de una política agraria que garantice el derecho
a la tierra y el territorio, en condiciones dignas para la vida, para esto
exigimos:
1.1 Soberanía y
autonomía alimentaria, donde el Estado no nos imponga semillas transgénicas desplazando
las semillas nativas, amenazando nuestra biodiversidad.
1.2 La
comercialización de productos campesinos donde se garantice sin intermediarios
y con precio justo, garantizando además la capacitación técnica y los subsidies
necesarios para proteger la economía campesina.
1.3 Legalización
y protección de los títulos de propiedad de tierras.
1.4 Fomento y
protección a los procesos de titulación colectiva como son los resguardos
indígenas, los consejos comunitarios de afrodescendientes y las Zonas de
Reserva campesinas,-
esto dentro del marco de la construcción de los territorios
a partir de la autonomía en la constitución de planes de vida o planes de
desarrollo locales, así mismo la creación de los Planes de Ordenamiento
Territorial alternativos.
2. Las
comunidades campesinas y mineras de Antioquia, exigimos la soberanía sobre
nuestros recursos minero energéticos, por lo tanto proponemos la construcción-
del Nuevo código minero coherente con las necesidades de las comunidades que
respete el trabajo que históricamente se ha sido desarrollado por mineros
artesanales y la mediana minería.
2.1 Esto dentro
de un proceso de nacionalización de recursos, donde el país sea beneficiario de
las riquezas. En este sentido exigimos que las grandes empresas multinacionales
salgan de nuestros territorios.
2.2 Legalización,
protección de títulos mineros, así como el apoyo para tecnificar los procesos
de minería locales.
2.3 Protección
del medio ambiente mediante la creación de proyectos alternativos de
extracción.
2.4 Garantía de
realización de la consulta previa, libre e informada frente a los grandes
megaproyectos agrarios y minero energéticos.
2.5 Exigimos
garantizar la seguridad de nuestros compañeros mineros, no más estigmatización
del trabajo minero.
3. Las
comunidades del Norte y Nordeste Antioqueño exigimos la garantía de los
derechos humanos de forma integral donde la justicia social sea la premisa para
la construcción de la paz,-
en este sentido los temas de derecho a la vida,
salud, educación, trabajo, movilización, libre asociación, tierra y territorio,
libertad, libre expresión deben liderar la agenda de discusión nacional.
Hacemos públicamente la denuncia de las constantes
estigmatizaciones a los campesinos y a los líderes comunitarios, exigimos la no
repetición de estos hechos, si se va aparar la Guerra se debe parar la
criminalización de líderes de organizaciones sociales. Para ello proponemos:
3.1 la creación de una mesa regional constituyente, que
dé cuenta del contexto puntual de la región y permita la efectiva acción sobre
las problemáticas regionales en material de derechos humanos.
Donde participen
todas las organizaciones que estén comprometidas en la construcción de
políticas integrales y soluciones de paz con justicia social.
En el marco de estas exigencias proponemos los espacios
de las constituyentes por la paz como el escenario político de discusión en
donde sean las comunidades quienes construyamos las propuestas de un país en
paz con justicia social. Las constituyentes son un mandato popular.
Estos puntos se configuran en una propuesta de un Nuevo
país que tiene como fin, además, exigir a los actores en conflicto-
no
levantarse de la mesa hasta no conseguir una paz con justicia social, exigimos
el cese al fuego de forma inmediata, no podemos dialogar en medio de las balas.
La impunidad no puede seguir siendo una política de estado, exigimos la no
repetición, la reparación integral de las víctimas y un perdón público. Debemos
cesar la Guerra para lograr la paz.
Las comunidades del norte y nordeste de Antioquia
caminamos este emblemático 12 de octubre por la construcción de tan anhelada
paz exigiendo una vida digna y un país donde quepan todos nuestros sueños.
Firman: Comunidades campesinas y mineras del norte y
nordeste de Antioquia
Cahucopana, Ascna, Consejo Mayor Comunitario del Porce,
Aza, Acvc, Asociación Agraria y minera de Amalfi, Asagrama, Cepela y Cultura y
Libertad.