Terrorismo de
Estado
Ola de falsos
positivos judiciales contra campesinos de San José de Apartadó
Por Camilo
Raigozo. Notimundo
La Asociación
Campesina de San José de Apartadó, denunció que el pasado 10 de febrero
militares pertenecientes al Batallón Voltígeros detuvieron de forma ilegal y
arbitraria al líder campesino Norbey Antonio Goez Úsuga.
Ante el
continuo acecho tanto de militares, como de paramilitares, en el momento en que
los hombres armados abordaron al labriego, este asustado salió corriendo siendo
alcanzado en inmediaciones del barrio 20 de Enero.
Según la
fuente, contrasta la apremiante persecución de los militares contra los campesinos
con la permisividad y connivencia del Ejército con los grupos paramilitares que
actúan libremente.
Desde el 22 de
diciembre anterior la inteligencia militar conjuntamente con la Fiscalía
emprendieron una feroz persecución contra los dirigentes de las comunidades al
punto que al menos siete labriegos han sido capturados y encarcelados con base
a montajes judiciales.
La asociación
campesina y su comité de derechos humanos responsabilizan al Estado por la
salud y la vida de Arley Cartagena y Laura Cataño, quienes se encuentran en
grave estado de salud en cárceles de Medellín desde diciembre pasado.
Del mismo modo
exigen a los entes de control para que investiguen y sancionen a los agentes
del Estado que han venido cometiendo estas arbitrariedades contra los
campesinos.
Por otro lado el pasado 12 de febrero mientras hacían
mercado en el casco urbano de San José de Apartadó fueron detenidos de manera arbitraria
los esposos Carlos Albeiro Montoya y Francis Tamayo por miembros del Batallón
Voltígeros quienes carecen de funciones judiciales.
Las dos nuevas víctimas del terrorismo de Estado fueron
conducidas por los uniformados hasta la vereda Caracolí.
Allí dejaron en libertad a Francis pero a su esposo lo
trasladaron a Medellín donde –dice Lafuente- intentaron desaparecerlo, pues en
la Sijin, estaciones de Policía, el sótano de los juzgados del edificio de la
Justicia y Fiscalía Medellín, negaron tenerlo en su poder.