Popayán, Cauca
Intentan desaparición forzada de defensora de derechos humanos
y la Policía actuó como cómplice
Por: Camilo Raigozo
Ayer 19 de abril a las 9 de la mañana, cuando la
defensora de derechos humanos Sofía López abandonaba las instalaciones de la
Fiscalía, fue agredida por dos sujetos quienes dijeron pertenecer a la Sijin e
intentaron secuestrarla.
Ante los gritos de la víctima se armó un trancón, llegaron líderes sindicales y la Policía. Sin embargo los policías se
pusieron del lado de los victimarios y contra la víctima.
A continuación el texto íntegro de la denuncia hecha
por la Corporación Justicia y Dignidad:
Intento de desaparición forzada de la de defensora de
Derechos Humanos Sofía López Mera
Siendo las 9 de la mañana del día de hoy 19 de abril de
2013, cuando la defensora de derechos humanos Sofía López, salía de la unidad
de "Justicia Y Paz" de la Fiscalía en Popayán, Cauca, un sujeto
desconocido de civil la llamó por su nombre.
La abogada le contestó que ella no lo conocía, que la
dejara tranquila, por lo que el sujeto la estrujó y la tomó fuertemente del
brazo diciéndole que la acompañara.
Al ver que la abogada no le contestó nada, el sujeto le
gritó que ella "tenia una orden de captura del sexto". Al tiempo
llegó otro sujeto, que de rapidez mostró un supuesto carnet el cual no puedo
ser visto por la abogada y le dijo que era de la SIJIN, que lo acompañara, al
tiempo que intentaba registrarle sus pertenecías.
La abogada se soltó del sujeto y tomó un taxi que pasaba
por el lugar. El sujeto se subió al taxi e intentaba esculcar las pertenencias
de la abogada y le dijo al taxista haga lo que yo le digo.
En medio de las voces de auxilio de la abogada, se formó
un trancón en la vía y otras personas se acercaron al lugar. Como pudo la
abogada llego a un lugar de llamadas telefónicas en medio de las agresiones
físicas del sujeto que no se identificó.
En ese momento llegó una patrulla de policía y a pesar de
que la abogada exigió al sujeto la identificación, el tipo se negó a darla.
Posteriormente llegó un agente de la Policía de apellido
Duvan Najar a quien la abogada le manifestó que era defensora de derechos
humanos y que tenía Medidas Cautelares de la Comisión Interamericana de
Derechos Humanos, CIDH, y denunció el hecho de que el sujeto de civil que no se
quiso identificar la maltrató físicamente y que sin su voluntad la quería
llevar en un taxi.
Le exigió también que identificaran al hombre de civil.
El Policía Duvan Najar, ante la exigencia de identificar al sujeto de civil,
respondió que él que era el que mandaba, que cuales medidas cautelares, y le
dijo usted no tiene como comprobar eso, y además obligó a la abogada a mostrar
todo lo que tenía en su maletín.
Entre las pertenencia de la abogada se encontraba un Acta
de la Unidad Nacional de Protección, su agenda, y su portátil. A pesar de ello
el sujeto sin identificar manifestaba que la abogada tenía “orden de captura
del sexto” y quería arrebatarle sus documentos de identidad.
Ante tan fragrante agresión el agente de la policía Duvan
Najar reitero que él era el que mandaba y exigió los documentos de
identificación de la abogada. La abogada exigió presencia de organizaciones
sociales, de la defensoría del pueblo, y de derechos humanos.
El Policía dijo que él no iba a llamar a nadie porque él
era la autoridad y le dijo a la abogada que ella no tenía como demostrar que
tenía Medidas Cautelares y que ella debía irse hasta la SIJIN.
Luego de llegar al lugar, líderes sindicales de Anthoc Cauca,
de la CUT y de otras organizaciones sociales, y una vez la policía nacional
constató que la abogada no tenía orden de captura, ninguna de esas autoridades
pudo dar explicaciones lógicas de la retención.
Se exigió por parte de los dirigentes sociales que el
sujeto que agredió, e intento llevarse a la abogada, se identificara, y la
Policía no lo quiso identificar y dijeron que no podían dar esa información.
Igualmente cuando el hermano de la abogada llegó al
lugar, los miembros de la policía nacional, le tomaron fotografías, le pidieron
sus documentos de identidad. Un efectivo regular de la policía Nacional tenía
una cámara con la que filmó a todos los dirigentes sindicales, a los familiares
y a la abogada.
Por los antecedentes de amenaza y hostigamientos de parte
de funcionarios estatales y paramilitares en los últimos días, y ante la
ausencia de explicaciones de parte de parte de los supuestos agentes de civil y
los policiales, consideramos que el fin era desaparecer a la abogada Sofía
López.
Los abogados de la Corporación Justicia y Dignidad
acompaña jurídicamente casos de graves violaciones a los derechos humanos en la
región y ha denunciado en variadas ocasiones ante La Comisión Interamericana de
Derechos Humanos y la ONU al Estado de Colombia, por casos de Ejecuciones
Extrajudiciales,-
Desaparición Forzada, Tortura, Desplazamiento Forzado,
violaciones a la Libertad Sindical, ocurridos en los departamentos de Putumayo,
Cauca, Valle del Cauca y Nariño, atribuibles a agentes estatales, en la mayoría
de los casos con la participación de grupos paramilitares.
Hacemos un llamado a la Cancillería Colombiana para que
aclare tan grave situación y coordine con la unidad de protección y ofrezca las
garantías necesarias para proteger la vida e integridad física y moral de la
doctora Sofía López.
Al presidente de la Republica, Juan Manuel Santos, para
que sus palabras de garante de los Derechos Humanos, ofrecidas frecuentemente
ante la Comunidad Nacional e internacional y organismos de Derechos Humanos, se
traduzcan en hechos efectivos.
Asimismo hacemos un llamado a La Oficina De Derechos
Humanos de la ONUy a la CIDH, para inste al estado a respetar a los defensores
de derechos, su trabajo y sus organizaciones.