“La Ley 100 no acepta remiendos, hay que hacer un cambio
estructural de la salud”: Gloria Inés Ramírez
Por Camilo Raigozo. Notimundo
El pasado 10 de abril la sociedad civil representada en la
Comisión de Seguimiento a la Sentencia T-760 de 2008 y de Reforma Estructural
al Sistema de Salud y Seguridad Social, CSR, y la Alianza Nacional por un Nuevo
Modelo de Salud, Ansa, radicó en la Secretaría General del Senado el Proyecto
de Ley Ordinaria en Salud.
En el acto estuvieron presentes algunos de los 18
congresistas que apoyan la iniciativa, entre ellos la senadora Gloria Inés
Ramírez, el secretario de salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, organizaciones de
la sociedad civil, ONG´s, organizaciones médicas, organizaciones de pacientes y
organizaciones académicas.
“Nosotros como congresistas estamos comprometidos con
este proyecto de ley, no solo de ayudar a la presentación y de coadyuvar en el
proceso de construcción, sino que vamos hacer un debate grande y profundo ante
el país”, dijo Gloria Inés Ramírez.
Entre el proyecto de ley de reforma a la salud presentado
por el Gobierno y el que presentó la sociedad civil hay enormes diferencias.
Empezando porque el proyecto del gobierno ve a la salud
como una mercancía y un jugoso negocio de particulares, mientras que el de la
sociedad civil pone a la salud como un derecho fundamental y por ende de
obligatorio cubrimiento por el Estado.
“Hay dos proyectos de ley de esencia totalmente
diferentes. El que ha planteado el Gobierno Nacional a través del ministro de
Salud, que mantiene con nombre distinto el jugoso negocio de las EPS, que tanto
daño les han hecho a los colombianos y un sistema de salud que colapsó y que no
es coherente con la ley estatutaria.
“Y por otro lado nuestro proyecto, que pone a la salud
como un derecho fundamental del ser humano y desde allí acabaremos con la
odiosa centralización que se tiene hoy. Vamos a la descentralización, con un
modelo de salud que tenga como base la comunidad y no el capital”, expresó
Ramírez Ríos.
Las siguientes son algunas de las diferencias existentes
entre el proyecto presentado por el gobierno y el presentado por la sociedad
civil, según Ansa:
Concepción de la
salud: Para la sociedad civil (SC) es un derecho fundamental. Para el
gobierno es un negocio privado.
El acceso a los
servicios médicos: Para la SC, debe prestarse directamente en el lugar de
residencia o trabajo, con la sola presentación del documento de identidad.
Para el gobierno, a través de las EPS o EGS, presentando
carnet y de acuerdo a los convenios que las empresas intermediarias tengan.
Financiación:
Para la SC, con recursos públicos provenientes de cotizaciones e impuestos.
Para el gobierno, con recursos públicos provenientes de
cotizaciones e impuestos y recursos de las personas y sus familias, a través de
cuotas moderadoras y copagos según su capacidad económica.
Destino de los
recursos de la salud: Para la SC, deben ir a la salud pública teniendo en
cuenta la estrategia de Atención Primaria en Salud y servicios médicos
requeridos. Los recursos son públicos de principio a fin y deben ser invertidos
únicamente en Salud.
El Estado garantiza, proteger y respetar el derecho
fundamental a la salud. Su papel es central en la toma de decisiones, controla
el sistema y orienta las políticas del sector.
Para el gobierno, los recursos van para los intermediarios
privados llámense EPS o EGS y lo que sobre al pago de servicios de salud.
Los recursos dejan de ser públicos cuando se giran a las
EPS o EGS. Los recursos públicos se podrán invertir en lo que los privados
quieran, como canchas de golf, edificios, clubes, turismo, condominios, etcétera.
El papel del
Estado: Para la SC, el Estado garantiza, protege y respeta el derecho
fundamental a la salud. Su papel es central en la toma de decisiones. Controla
el sistema y orienta las políticas del sector.
Para el gobierno, el Estado limita su función de
garantizar, proteger y respetar el derecho a la salud de acuerdo a la oferta de
la empresa privada. Debilita su papel de controlar el sistema y de orientar la
política del sector. Las decisiones de salud siguen son secundarias a las
ganancias. Es decir se toman de acuerdo a la rentabilidad de las empresas.
“La gente está cansada de que se diga que la salud avanza
pero en la practica el servicio sigue siendo deteriorado, siguen las barreras
de acceso y siguen los mismos obstáculos.
“Con el concurso de todos vamos a trabajar para que los
colombianos tengan un programa distinto de salud. La Ley 100 no acepta
remiendos, hay que hacer un cambio estructural”, enfatizó Ramírez Ríos.
Finalmente la legisladora comunista le pidió al pueblo
colombiano que respalde la propuesta social con masivas movilizaciones, exigiéndole
al régimen en la calle y en las urnas que su voz sea escuchada, “así como lo hizo el 9 de abril en la Marcha
por la Paz para consolidar y configurar un cambio histórico, que haremos
también con la salud”.