Parauribismo/“Uno de los entrenados fue luego presidente de Colombia, no digo el nombre porque ustedes saben perfectamente quién es”, denunció ante el Tribunal Superior de Bogotá el mercenario israelí.
Por camilo Raigozo
El mercenario israelí Yair Klein, traído por el régimen
terrorista colombiano en la década de los 80 del siglo pasado para entrenar
escuadrones paramilitares, hizo fuertes denuncias ante el Tribunal Superior de
Bogotá.
En la videoconferencia Klein aseguró entre otras cosas
que los contactos los realizó a través de oficiales del Batallón Bárbula del
Ejército Nacional, con sede en Boyacá.
“El Ejército promovió estas organizaciones paramilitares,
el Ejército no daba la adecuada respuesta para combatir a la guerrilla por eso
permitían que entrenáramos a los paras”, le dijo el mercenario a los
magistrados.
Klein aseguró que todo el entrenamiento fue conocido y
avalado por el Ejército Nacional, que prestó una de sus bases y facilitó
armamento para realizar la adaptación de los modelos de crimen
El israelí dijo que entre los paramilitares que entrenó
había uno que luego fue presidente. “Uno de los entrenados fue luego presidente
de Colombia, no digo el nombre porque ustedes saben perfectamente quién es”.
Ante la insistencia de los magistrados para que diera el nombre de ese criminal, dijo más adelante, “no digo que haya sido una de las personas que entrenó sino que esa es una de las personas que pagó. El hacendado que se convirtión en Presidente pagó por mis servicios".
También dijo que en reiteradas oportunidades se reunió con un alto funcionario del DAS y con funcionarios del Ministerio de Agricultura y que allí se hablaba sobre la preparación de criminales.
Ante la insistencia de los magistrados para que diera el nombre de ese criminal, dijo más adelante, “no digo que haya sido una de las personas que entrenó sino que esa es una de las personas que pagó. El hacendado que se convirtión en Presidente pagó por mis servicios".
También dijo que en reiteradas oportunidades se reunió con un alto funcionario del DAS y con funcionarios del Ministerio de Agricultura y que allí se hablaba sobre la preparación de criminales.
“El Ejército y el Ministerio de Agricultura decidieron
vender ganado para lograr obtener mis servicios”, explicó Klein como una de las
formas de financiación del crimen.
Klein declaró en el marco del proceso que se le sigue al cabecilla
paramilitar del Magdalena Medio Ramón Isaza.
Las declaraciones de Klein, sumadas a las denuncias de
varias ONG defensoras de los derechos humanos, a las formuladas por varios
cabecillas paramilitares, a las del mayor Hernán Orozco (1)-
y a las divulgaciones
recientes de Carlos Ossa Escobar (2), permiten deducir que todas las acciones criminales de las Auc, paramilitares
o Bacrim, como se les quiera llamar, son acciones criminales del Ejército
Nacional de Colombia, como organización parte del terrorismo de Estado.
