Nuevas agresiones y amenazas contra defensora de derechos
humanos cuyo esposo fue asesinado por el Ejército
Por Corporación de Derechos Humanos
Caguán Vive
Carmen Leonor Roa es una reconocida lideresa que apoya el
proceso organizativo comunitario en especial el de las mujeres.
Actualmente es la encargada de Derechos Humanos de la
Asociación de Juntas de Acción Comunal de San Vicente del Caguán, Asojuntas, asociación
que agrupa 360 juntas de acción comunal
en San Vicente del Caguán.
Además hace parte de la Asociación de Mujeres por la Paz
y la Defensa de los Derechos Humanos en Colombia, Asodemuc.
El 27 de agosto pasado en el barrio Palmeras Altas, a las
9 de la noche, en el casco urbano de San Vicente del Caguán, cuando se dirigía
a su casa, en el sitio conocido como La Manga, dos sujetos interceptaron a Carmen
Leonor Roa.
Uno la cogió del brazo y la empujó hacía el otro, quien
le cogió del cabello e hizo que lo mirara a los ojos. “¿Carmen Roa?”. Ella le
dijo que sí.
“Mire vieja hijueputa, usted tiene que irse a predicar el
comunismo a la puta mierda. A usted le mataron su marido y sigue chimbeando”.
No la dejaron hablar porque todo el tiempo la insultaron.
El que le tenía cogida la cabeza era un hombre crespo, alto, con acento costeño
y de contextura gruesa.
“¿Usted a que comandante le obedece?”. Ella le contestó “¿Cuál
comandante?, yo trabajo con mujeres, a favor de los derechos de la mujer”.
El otro criminal le dijo: “¿Sí? Si usted mantiene
rezando, predicando comunismo”. Al momento que el segundo sujeto la soltó le
dijo: “Mire gran hijueputa, usted tiene que perderse de aquí, tiene esta noche
para que se pierda de aquí”.
Simultáneamente a la agresión verbal, le pegó con la rodilla
en un muslo y una patada, mientras le ordenaba que se “perdiera” del lugar.
Antecedentes
Primer desplazamiento: En enero del año 2005 el esposo de
Carmen Roa, Arnoldo Naranjo Ramírez, fue asesinado y presentado como integrante
del Frente 32 de las FARC, en la vereda La Pradera, inspección Arizona, municipio de Puerto
Caicedo, Putumayo.
Estos hechos se encuentran en investigación en la
Fiscalía 70 de Cali como un caso de “falso positivo”.
Los militares implicados en el crimen fueron acusados por
los delitos de homicidio, tortura y desaparición forzada, pero salieron libres
por vencimiento de términos. Por este hecho Carmen Roa fue desplazada de la
vereda.
Segundo desplazamiento: En junio de 2005 miembros del
Ejército Nacional llegaron a la vivienda temporal de Carmen Roa en su búsqueda,
lo que hizo que se desplazara nuevamente, esta vez del Putumayo.
Tercer desplazamiento: Luego de su retorno, en abril de
2008, recibió amenazas de muerte que la obligaron a salir nuevamente del
departamento.
El 27 de agosto
del mismo año salió definitivamente del Putumayo con apoyo del Comité
Internacional de la Cruz Roja, por amenazas derivadas de las denuncias hechas
por el asesinato de su esposo.
Cuarto desplazamiento: En Bogotá, donde se encontraba escondida, en el año 2009,
sufrió otra amenaza por denunciar el crimen de su esposo.
A raíz de esta amenaza, por medio de la Fiscalía le otorgaron medidas de protección temporale y la Corporación Claretiana Norman Pérez Bello la trasladó de ciudad.
A raíz de esta amenaza, por medio de la Fiscalía le otorgaron medidas de protección temporale y la Corporación Claretiana Norman Pérez Bello la trasladó de ciudad.
Quinto desplazamiento: El 7 de abril de 2010, en la
ciudad de Ibagué, fue víctima de un atentado contra su vida, la Corporación
Claretiana Norman Pérez Bello la trasladó nuevamente de ciudad.