El drama de desapariciones en Colombia se equipara a Irak, Congo y Sri Lanka
Por Efe
La desaparición en Colombia, que compromete a casi 62.000 personas, de ellas más de 16.000 de manera forzada, se equipara a la situación de países como Irak, República Democrática del Congo y Sri Lanka, castigados asimismo por prolongados conflictos armados.
Así lo consideró hoy el subdirector de litigios de la Comisión Colombiana de Juristas, Federico Andreu, en un foro celebrado en Bogotá como parte de los actos conmemorativos del Día Internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzosas.
"Es obvio que nuestra situación es como la de algunos países africanos como República Democrática del Congo, (y asiáticos como) Irak y Sri Lanka, países que tienen el lamentable privilegio de tener las cifras más altas de desaparición forzada", consideró.
Por su parte, el defensor del Pueblo colombiano, Volmar Pérez, estableció que en el contexto latinoamericano y en comparación con casos significativos de desaparición forzada como el argentino durante la dictadura (1976-1983), el dato colombiano de 16.655 personas es "superior" al del país suramericano, "de casi 10.000".
Pérez citó las estadísticas del Registro Nacional de Desaparecidos del Instituto de Medicina Legal al señalar que en Colombia hay 61.604 personas desaparecidas, de las que 14.427 son mujeres y 47.177, hombres.
"En lo que corresponde a la desaparición forzada, debemos decir que se registra un acumulado cercano a las 16.655 personas desaparecidas, y de ese universo se han encontrado 249 vivas y 557 muertas, lo cual significa que continúan desaparecidas de manera forzosa alrededor de 15.849 personas", añadió.
Los departamentos colombianos con mayor incidencia de este "crimen de lesa humanidad" son Bogotá (centro), Antioquia (noroeste), Valle del Cauca (suroeste), Meta (centro), Norte de Santander y Santander (noreste).
Pérez, quien también preside el organismo interinstitucional Comisión Nacional de Búsqueda de Personas Desaparecidas, distinguió entre "desaparición en términos generales" y "desaparición forzada de personas" y explicó que sólo se puede hablar de este último fenómeno cuando se establece "el origen real de la desaparición".
Asimismo, observó que en la desaparición general pueden concurrir otras circunstancias, como enfermedades mentales o "la simple ausencia de la residencia (de la persona) en su región".
No obstante, el registro de desaparecidos y las investigaciones prosiguen en Colombia, por lo que el número de desapariciones forzosas no está cerrado aun, pues en el país andino persiste un conflicto armado vigente desde hace más de medio siglo.
El funcionario del Estado señaló que estas cifras corresponden a un acumulado histórico que comprende registros aproximadamente desde la década de los cuarenta hasta el presente y en la que se integran sólo los casos que son denunciados y no todos los acontecidos.
En tanto, el representante adjunto en Colombia de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Oacnudh), Juan Carlos Monge, valoró que ocupar "uno de los primeros lugares a nivel mundial" en desplazamiento forzoso "debería haber sido suficiente motivo" para que la sociedad del país andino se volcara en el propósito de erradicar este crimen.
Monge resaltó que a pesar de haberse derogado normas como la Ley 1408 o de homenaje a las víctimas en 2010, en Colombia sigue habiendo un índice de impunidad "muy alto", que deriva de una "brecha entre el marco normativo y su aplicación".
Gloria Gómez, hermana de un estudiante de la Universidad Nacional de Bogotá desaparecido en la década de los ochenta y directora de Asfaddes (Asociación de Familiares de Detenidos y Desaparecidos de Colombia), reclamó el respeto a la dignidad de las personas en esta condición al menos en la celebración de su día internacional.
"Hoy, 30 de agosto, ellos merecen ser dignificados, ya no solamente por su familia (...). Es un derecho que esta sociedad y las autoridades les reconozcan y les devuelvan el buen nombre que les han quitado", dijo Gómez.
El Día Internacional de la Víctimas de Desapariciones Forzosas se conmemora este martes por primera vez bajo el paraguas de la ONU, desde que hace meses entrara en vigor la Convención sobre la Protección de todas las Personas contra las Desapariciones Forzosas con la firma de sólo 28 países entre los que está Colombia.