El monstruo del Ejército fue hallado culpable de
violaciones sexuales y asesinatos de menores en Tame, Arauca
Por Camilo Raigozo
Por Camilo Raigozo
El oficial de Ejército Nacional, Raúl Muñoz Linares, fue declarado
culpable de la violación sexual de dos niñas y del asesinato a sangre fría de
una de ellas, junto a sus dos hermanitos de 6 y 9 años de edad.
Casi dos años duró el juicio contra el terrorista del
régimen, el cual estuvo lleno de innumerables artimañas de la defensa que
lograron dilatar y poner en vilo la acción de la justicia.
Este proceso demuestra que los miembros de la Fuerza
Pública implicados en crímenes de lesa humanidad, de guerra y otras violaciones
a los derechos humanos, cuentan con todas las garantías de la justicia
ordinaria para garantizarles procesos justos e imparciales.
Lo anterior deja sin piso una vez más las voces del
Presidente, del ministro de Defensa, de los altos mandos castrenses y de un
sector retardatario, cuando afirman que necesitan la ampliación de un fuero
especial que proteja a los militares para adelantar la guerra, porque supuestamente
la justicia ordinaria no les brinda las garantías de procesos justos e
imparciales.
Lo que sí queda demostrado es que con la ampliación del
fuero militar lo que se busca es la impunidad de los miembros de la Fuerza
Pública inmersos en crímenes, desapariciones y otras violaciones a los derechos
humanos.
El proceso contra el bandido del Ejército dejó a una
jueza asesinada, inocentes encarcelados, familiares de los menores y testigos
amenazados, desplazados y en inminente peligro de muerte, por lo cual el
ministro de Defensa y los altos mandos militares deberían darle una explicación
al país.
Otro de los ardides con el que la defensa, en complicidad
con los medios, quiso amparar con impunidad al monstruo, fue culpar de los
demenciales hechos a la insurgencia de las FARC.
Para el efecto usaron testimonios de supuestos desmovilizados de la guerrilla, elaborados en la Fabrica Nacional de Testigos del Ejército.
Esta estrategia, junto a la de supuestos correos encontrados en computadores de la guerrilla, han sido utilizadas contra personas inocentes en otros casos. Afortunadamente esta vez no dieron resultado y el terrorista debe ser condenado a al menos 60 años de cárcel.
"No queda duda de que fue Raúl Muñoz y no otro, el
que abusó de la menor el 2 de octubre del 2010. Quedó demostrado que Muñoz
violó a la segunda niña y la asesinó junto a sus hermanos para ocultar el
hecho. Era consciente de lo que estaba haciendo", dijo la jueza.
La togada criticó al Ejército por no reaccionar
rápidamente. Cabe recordar que cuando familiares de las víctimas y testigos culparon
al Ejército, el general Alejandro Navas dijo a través de algunos medios que las
violaciones habían sido con el consentimiento de las niñas.