Terrorismo de Estado
Desaparición forzada de dirigente campesino defensor de
los derechos humanos en Mapiripán, Meta
Por: Camilo Raigozo
La Fundación Por la Defensa de los Derechos Humanos y el
DIH del Oriente Colombiano, Fundación Dhoc y otras organizaciones sociales
denunciaron que en cercanías de la cabecera municipal de Mapiripan, Meta, entre
el rio Guaviare abajo y la finca de doña Herminia, fue desaparecido el pasado
24 de marzo en las horas de la tarde Alonzo Lozano.
La nueva víctima del terrorismo de Estado es el presidente
de la Asociación de Trabajadores Campesinos de la Región del rio Guaviare Asocatragua.
Además es coordinador de derechos humanos de la Fundacuín Dhoc.
Igualmente había sido delegado por Marcha Patriótica para
coordinar la movilización y participación de los habitantes de esa región para
el evento del 9 de abril en la ciudad de Bogotá en respaldo a la mesa de
dialogo entre el gobierno y las FARC en La Habana.
Lozano se encontraba desde el 18 de marzo en
Villavicencio participando en reuniones de la Fundación Dhoc y de la
organización Mucapoc. Luego de terminadas estas reuniones el 22 de marzo, salió
para su región, más concretamente a la vereda Matabambu jurisdicción del municipio de Mapiripan.
Las comunidades y sus organizaciones sociales exigieron
al régimen hacer una exhaustiva investigación de los hechos, "ya que este nuevo
caso no es casual, sino que se suma a otros oportunamente denunciados, como
fueron los recientes seguimientos a delegados de Mucapoc en Villavicencio durante
los días de la asamblea general, específicamente el día 20 de marzo pasado y el
hostigamiento constante de la Policía Nacional
a la sede de esta organización campesina en dicha ciudad".
Igualmente las comunidades denunciaron los retenes
ilegales y los empadronamientos por parte del Ejército contra las delegaciones
de diversas organizaciones cuando se dirigían al Tercer Encuentro de Zonas de
Reserva Campesina, que se realizó en el municipio de San Vicente del Caguan, Caquetá,
los pasados 22 y 23 de marzo.
Así mismo las comunidades y las organizaciones sociales
del oriente colombiano hicieron un llamado a la comunidad nacional e
internacional, para que se solidaricen con las poblaciones afectadas por el terrorismo
de Estado e insten al régimen que padece Colombia, a que cese estos actos
criminales por intermedio de sus fuerzas militares y paramilitares.