El régimen expulsó violentamente a familias campesinas en
beneficio de un terrateniente
Por Coordinación Campesina de Cajibío
Por Coordinación Campesina de Cajibío
El Municipio de Cajibio, en el Departamento del Cauca, se
caracteriza por ser un territorio invadido por el Monopolio de Pino y Eucalipto
y el abandono del Estado frente a la dotación de tierra a campesinos.
Históricamente el Estado y sus gobiernos, ha ignorado las innumerables problemáticas
en lo social, económico y cultural, generado por la imposición de una política
de desarraigo y despojo, que ensancha el conflicto social, cuyo origen se
encuentra-
en la inequitativa distribución de la tierra y ante la cual han
optado por resolver los problemas sociales y populares por la vía militar cosa
equivocada que cada día agudiza el conflicto y desangra el país.
Cuando el campesinado expresa al gobierno Nacional el
cumplimiento de la obligación que tiene como Estado, pero a su vez presenta propuestas
alternativas para la solución de los conflictos, lo que recibe es maltrato,
amenazas y señalamientos.
Ante tal situación de abandono el campesinado ha
optado por trabajar y dar vida a las
tierras inoficiosas, dando cumplimiento a la función social de trabajar la
tierra y ponerla a producir alimentos, tarea que vienen haciendo por más de un
año en la finca la Filigrana.
Lo acontecido el 16 y 17 de enero en la finca la
Filigrana, con la quema de los ranchos, el arranque de los cultivos de
campesinos por parte del Esmad.
Y la delegación indígena que ubicada desde
montañas contiguas observaba el circo romano que se abalanzaba sobre sus
compañeros de clase.
Sumado al ingreso al predio la policía, la propietaria y
la dirigencia indígena para esperar al Incoder departamental, y dar inicio al
proceso del estudio social y de tierras, coloca en evidencia como la dirigencia
indígena del Cauca-
en alianza con propietarios de predios, fiscales, jueces, la
fuerza pública y funcionarios del Incoder departamental, busca afianzar los
derechos de unos pisoteando y consolidando la política de exterminio del
campesinado.
Desconocer los orígenes del conflicto en Colombia es
desconocer la problemática y condenar al pueblo trabajador al desarraigo,
opresión, desplazamiento, judicialización y muerte cuando la respuesta-
debe ser
concertando y dando soluciones a las diferentes problemáticas con política de
las comunidades y no con imposiciones de aquellos que ubican las problemáticas
desde los escritorios Nacionales e internacionales.
De seguir esta situación como viene desde hace doscientos
años el pueblo se verá en la obligación de dar respuesta organizada y
contundente para defender sus derechos por su propia cuenta porque ya estamos
cansados de tanta guerra y terrorismo por una minoría de terratenientes,-
empresarios y dueños de los bancos que explotan el trabajo del pueblo sometido
al hambre y la miseria, sumándosele en el departamento del cauca una dirigencia
indígena confundida, entre el acomodo económico y aires de poder asentados en
los ochos años del oscurantismo Uribista.
Llamamos a las organizaciones sociales y populares a
estar alerta y solidarizarse con los campesinos de Cajibio por lo que pueda
pasar ya que están siendo amenazados,-
señalados y desarraigados porque siendo
de Cajibio le están dando prioridad a la compra de tierras de particulares que
no son del Municipio antes que a los de su propio terruño natal.