Amaranta Curtidor Piñacue, de 8 años, fue asesinada por el sistema de salud colombiano
Por: David Curtidor Argüello
311 5165106
Por: David Curtidor Argüello
El pasado 9 de agosto a las 0:20 minutos, falleció mi
hija de 8 añitos, Amaranta Curtidor Piñacue, víctima del sistema de salud
colombiano,-
que prefirió ahorrarse unos pesos y no tomarle un exámen que
resultaba de rigor por los síntomas clínicos que presentaba la niña.
Si bien en cualquier parte del mundo puede ocurrir que un
error médico propicie la muerte, lesiones o incapacidades a las personas, en
Colombia el sistema de salud está diseñado-
con perversos incentivos para que
los intermediarios financieros que ahora controlan el negocio, se lucren con
mucho dinero negando servicios que como en nuestro caso resultan vitales.
A esos efectos se han inventado autorizaciones, permisos,
protocolos y otras trabas, más allá de lo legalmente permitido y admisible,-
con
lo que desestimulan la consulta formal y el uso de los servicios que ofrecen y
por los cuales los colombianos pagamos el respectivo aseguramiento.
En razón de que la muerte de Amaranta tiene su causa en
el sistema, no queremos que eso quede en la impunidad y si bien agotaremos las
vías legales para que se castigue la desidia y negligencia-
de las muchas
personas que obviaron ordenar los exámenes correspondientes, queremos que la
responsabilidad política recaiga en el verdadero culpable, el Sistema de Salud
en su conjunto.
En días pasados, por ejemplo, se hundió otro proyecto de ley
que planteaba establecer la salud como un derecho y no como un negocio.
En general hay indignación por los graves casos que
ocurren como consecuencia de la inadecuada atención que reciben en las personas
y todos los días nos vamos a encontrar-
un grave hecho de niños, ancianos y todo
tipo de personas que se incapacitan, mueren o quedan con secuelas físicas por
la pésima atención, y esto considerando un subregistro mediático.
Desde el momento del sepelio de Amaranta, decidimos que
esto no puede continuar y que iniciamos la campaña ¡¡Amaranta vive!!,-
buscando
evitar que los colombianos se sigan muriendo por falta de atención o por el
deseo de las empresas de ganar más y más dinero negando servicios de salud.
Como se trata de hacer del caso de mi hija un símbolo de
esa lucha, vamos a poner en práctica diferentes actividades de visibilización
de estos temas, dado que mi hija era indígena Nasa,-
las organizaciones
indígenas se pusieron a disposición para apoyar política y socialmente este
tema, en el Congreso de la ONIC, la Asamblea votó unánimemente adelantar esta
campaña con Amaranta como ese símbolo.
En pasados días se hizo un concierto por la paz en el
departamento del Cauca y allí tuvimos oportunidad de hacer una suerte de
lanzamiento de la campaña, lanzamiento que estamos-
aplazando en espera de
evitar que puedan hacer presión ante las autoridad que debe hacer la necropsia,
pues es muy común que los resultados se cambien y luego se diluyan las
responsabilidades de quienes indebidamente propiciaron su muerte.
Envío una fotos de los eventos reseñados, estamos en la
construcción de la página www.amarantavive.org y esperamos hacer el lanzamiento
una vez tengamos los resultados de medicina legal,-
pues tememos que haciendo
ruido, puedan alterarse los resultados, e inventarse cualquier cosa a
contramano de los hechos y la historia clínica que evidencia sin discusión la
grave negligencia.
Como el tema es enjuiciar al sistema, necesitamos mucho
apoyo para los más variados temas, como la movilización de los indígenas que
son de Bogotá y que asistirían a plantones y otros eventos, información sobre
las andanzas de los directivos de la EPS que mató a Amaranta, etc.
El tema legal lo va a llevar el Colectivo y ya hay en
camino una investigación de tipo penal que oficiosamente abrió la Fiscalía.
A más de esa esperamos sanciones éticas, civiles, pero
especialmente el enjuiciamiento político del Sistema, vamos a cobrar como
corresponde la muerte de semejante persona.
Cordial saludo.
David Curtidor Argüello 311 5165106